Vamos a morir un poco hoy

Cinco medallas olímpicas, 18 récords mundiales y seis años sin una sola derrota en los 10.000 metros: éstos son sólo los logros deportivos más significativos de Emil Zátopek. En los entrenamientos se esforzaba como nadie, pero en la vida conseguía mantener la perspectiva y el sentido del humor. En el espíritu de los ideales olímpicos, veía el deporte como un medio para establecer amistades entre personas de todas las naciones, y muchos competidores recordaron los momentos que pasaron con Zátopek a lo largo de sus vidas.

En la biografía sensible y equilibrada de Askwith, Zátopek emerge de la cáscara del mito para revelarse ante todo como un hombre amable, inmediato, inteligente y ocasionalmente imperfecto, que conservó su humildad y sentido común incluso en la cima de su fama deportiva, y no se amargó ni siquiera cuando sus actitudes cívicas le causaron un duro revés después de 1968 y pasó años en la oscuridad.

El libro se basa en un estudio extremadamente minucioso de fuentes checas y extranjeras (incluidos archivos de las fuerzas de seguridad) y en numerosas entrevistas con amigos, colegas, rivales y familiares de Zátopek, especialmente la esposa de Emil, la campeona olímpica Dana Zátopková.